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Dificultades y conflictos en la pareja
El amor no basta para mantener tu relación a salvo de sentimientos de ira y enfado, de resentimiento y frustración, de tristeza y decepción... cuando tus deseos y expectativas no se cumplen.
Ceder, cooperar, comprometerse, comprender, escuchar... son recursos que contribuyen a mantener y fortalecer el amor hacia el otro y la ilusión de continuar compartiendo un proyecto de vida en común.
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Las dificultades y conflictos son elementos ineludibles en una relación afectiva.
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Las parejas que continúan unidas en el tiempo y mantienen una relación satisfactoria lo consiguen no por la ausencia de dificultades y conflictos sino por una buena gestión de los mismos.
Dificultades comunes
Entre las dificultades comunes por las que pasará una pareja se encuentran las siguientes:
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Reparto de las tareas domésticas
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Distanciamiento emocional y falta de intimidad
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Problemas en la comunicación
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Resentimiento, rabia y frustración por las expectativas no cumplidas
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Rutina
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Vida sexual insatisfactoria
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El tránsito hacia la paternidad y la maternidad
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Acontecimientos críticos (fallecimiento de un ser querido, pérdida del trabajo, dificultades económicas...)
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Relaciones de poder y control nocivas entre ambos
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Discusiones y reproches dolorosos
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Malentedidos no resueltos
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Desavenencias en la educación de los hijos y en la relación con la familia
Objetivos de la terapia
Si estás pasando dificultades en tu relación, estos pueden ser los objetivos de la terapia antes de que la situación empeore:
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Aclarar y superar malentendidos
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Gestionar y resolver los conflictos comunes de la vida en pareja
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Afrontar los problemas de la relación
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Potenciar la inteligencia emocional de ambos
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Mejorar la comunicación y la capacidad de negociación
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Orientar hacia unas expectativas realistas
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Mejorar la intimidad, favorecer la pasión y consolidar el compromiso
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Y otros objetivos personalizados a considerar durante la terapia.
Crecimiento en pareja
Si discutes con frecuencia y crees que ese modo de relacionaros afecta a vuestra relación provocando malestar, distanciamiento, frustración y resentimiento... no esperes a mañana.
Qué puedes hacer desde hoy mismo:
Evalúa esta creencia: "El otro ha empezado".
La gran trampa a la hora de discutir y tener la razón es pensar que ha sido el otro quien ha empezado la discusión o la ofensa, ya que las relaciones son circulares.
¿Qué seguridad tienes de no haber dicho o hecho algo que iniciara la escalada del conflicto antes de que tu pareja diera la primera muestra de tensión o enfado?
Ideas
Claves para el cambio
Pueden ocurrir cambios importantes si las parejas mejoran su capacidad para comunicarse; escuchar con más atención, expresar sus deseos de un modo más eficaz y definir y encarar los problemas con un espíritu de colaboración.
A.T. Beck
¿Qué te gustaría hacer
con tu pareja?
La manera de interrumpir una espiral descendente es adoptando una conducta nueva. No se pueden cambiar los sentimientos a voluntad; por eso conviene probar a cambiar la conducta. Es el único modo seguro de que algo cambie.
S. Page